Durante su infancia en Vicksburg (Mississippi), en el corazón del Delta, el joven Terry Evans cantó en el coro de una iglesia como tenor, barítono y bajo.
No se le permitía cantar música secular, por lo que tuvo que escabullirse para escuchar y cantar la música entonces prohibida: el rock 'n' roll.
Después de escuchar en secreto a artistas como Elmore James, Little Walter, Albert King o BB King, por nombrar algunos, el futuro de Terry quedó marcado: se convertiría en cantante de soul.